Avocetas

Aunque ahora estamos sofocados de calor, es tiempo de piscina, cervecita en terraza, las típicas fiestas estivales de los pueblos (ahora son fiestas en la mitad de España, y mi pueblo no podía ser menos), etc. basta con interpretar un poco las señales que nos da la naturaleza para que nos demos cuenta de que el principio del fin (del verano) está próximo. Uno de estos síntomas es el paso migratorio que muchas especies de aves realizan después de la cría, con el objeto de alcanzar un lugar propicio donde pasar el frío invierno. Pues bien, este paso, iniciado ya hace días, sigue  su curso, inexorable, y a medida que van discurriendo los días se va haciendo más y más evitende. Un día más he podido comprobarlo en Arauzo de Salce.

La jornada, como de costumbre, comenzaba pronto, de modo que al alba ya estaba en el humedal presto para la observación. Como ya viene siendo habitual últimante, la primera especie que he localizado ha sido el  Andarríos chico Actitis hypoleucos, difíciles de cuantificar pues durante toda la mañana iban de un lado para otro, en buena parte condicionados por la presencia humana,  pero que no bajaba de los 37 individuos (cifra infravolarada, seguro). Antes de que aparecieran los primeros rayos del sol sobre el horizonte también he tenido mi primer contacto un adulto de Gaviota reidora Larus ridibundus, que me ha parecido ser el mismo visto el viernes pasado. También ha reaparecido otra vieja conocida, la joven Gaviota patiamarilla Larus michahellis observada por primera vez el 20/07/12, pues supongo que continúe siendo el mismo ejemplar.

Gaviota patiamarilla (Larus michahellis)

Hoy ha sido un día movido para la avocetas comunes Recurvirostra avosetta, quienes ya parecen estar en pleno paso. En la anterior entrada mencioné su presencia en la balsa la semana pasada (6 ejemplares observados el 09/08/12 por Fernando Román, Jacinto Román y Federico Vallés), y hoy de nuevo he podido constatar su presencia. A mi llegada había 3 individuos, posteriormente han entrado en el humedal otros 5 ejemplares y finalmente 3 más, de modo que al mediodía había un bando de 11 aves que se ha mantenido completamente agrupado en todo momento.

Avoceta común (Recurvirostra avosetta)

Otras limícolas vistas han sido: Avefría europea Vanellus vanellus (2), Archibebe común Tringa totanus (1) y Archibebe claro Tringa nebularia (1).

Avefría europea (Vanellus vanellus)

Y del resto presente en el humedal: Ánade azulón Anas platyrhynchos, Zampullín común Tachybaptus ruficollis (3), Somormujo lavanco (sobre la treintena), Cormorán grande Phalacrocorax carbo (3), Garza real Ardea cinerea (3), Milano negro Milvus migrans (1), Focha común Fulica atra (+100).

Garza real (Ardea cinerea)

De la avifauna observada en el entorno, paseriformes en su mayoría, cabe destacar la presencia de una joven Curruca carrasqueña Sylvia cantillans (aún no tenía confirmada la presencia de juveniles autóctonos en la VM62) y, ya en paso, un Mosquitero común Phylloscopus collybita y un Papamoscas cerrojillo Ficedula hypoleuca; en el caso de éste último, supone el segundo migrante que veo estos días, 4 días después de la primera observación postnupcial que certifiqué en Salas de los Infantes.

Y por último, un apunte fenológico referido a la pareja de cigüeñas blancas Ciconia ciconia que estaba establecida en la zona, y utilizo el pretérito porque al parecer ya han iniciado la migración. En esta zona de Burgos la Cigüeña blanca se comporta como una especie auténticamente migradora cuya fecha de partida gira entorno a mediados de agosto, es decir, ya mismo. Con el tiempo es de suponer que vayan adoptando las costumbres no migradoras que ya existen en otras localidades burgalesas, pero hasta que eso llegue tendremos que conformarnos y mentalizarnos que ya no las volveremos a ver hasta finales de año o comienzos del próximo. Qué tengan buen viaje!