Adiós, 2013, adiós!

31 de diciembre, el ciclo anual ha tocado a su fin, una vez más, y como suele ser habitual por estas fechas es hora de hacer balance de lo que nos ha deparado estos últimos 12 meses. Este 2013 ha sido un año intenso, enriquecedor, cargado de buenas observaciones. El año comenzaba bien, pues a comienzos de enero tenía la oportunidad de cumplir mi deseo de poder observar a dos de mis paseriformes emblemáticos: el ampelis europeo Bombycilla garrulus y el pardillo sizerín Carduelis flammea, dos pájaros por los que siempre he sentido una irracional fascinación desde la primera que los vi en fotografías hace ya muchos años, y a los que ya dediqué un post en su día (http://avesdeburgos.blogspot.com.es/2013/01/hat-trick-en-navarra-ampelis-europeo.html).

Sin embargo, ha sido en "mis dominios" donde he tenido la ocasión de realizar la inmensa mayoría de las observaciones, alguna de ellas de alto interés a nivel local y/o provincial, unas por su condición de rareza y otras por su contribución al mayor conocimiento de la distribución presencial y reproductora de algunas de nuestras especies más habituales en la zona.

Como ya he dicho en alguna otra ocasión, el periodo invernal penaliza dúramente la actividad ornítica en toda esta comarca, la altitud y los rigores invernales serranos motivan que una buena parte de la población abandone la zona en busca de lugares más favorables. Y dado que nos encontramos en "temporada baja" y que estos días hay muy pocas novedades que contar, aprovecho para dejar algunas fotos que aún tenía por ahí sin compartir, por falta de tiempo más que otra cosa. Comienzo con una serie de imágenes de un grupo de mitos Aegithalos caudatus que me encontré a comienzos de octubre mientras buscaba a los primeros lúganos del año...
 

Mito común (Aegithalos caudatus)

...Otras imágenes pendientes, ya recogidas durante este mismo mes, son de especies tan habituales como representativas en el entorno de los pueblos durante el periodo invernal.

Machos de tórtola turca (Streptopelia decaocto) en plena disputa territorial. 05/12/13, Salas de los Infantes

Petirrojo europeo (Erithacus rubecula). 05/12/13, Salas de los Infantes

Petirrojo europeo (Erithacus rubecula). 10/12/13, Salas de los Infantes

Carbonero común (Parus major). 03/12/13, Salas de los Infantes

Alcaudón real (Lanius meridionalis). 03/12/13, Salas de los Infantes

Chova piquirroja (Pyrrhocorax pyrrhocorax). 04/12/13, Carazo

Estornino negro (Sturnus unicolor). 05/12/13, Salas de los Infantes

Gorrión molinero (Passer montanus). 10/12/13, Salas de los Infantes

Esta época navideña también es muy buena para pasear por cualquiera de las innumerables rutas que podemos encontrar en la zona, tan variadas como bellas. El inconviente de encontrarnos con los días más cortos del año se compensa con la ausencia de ese calor castigador del estío, que nos permite pasear sin problemas durante las horas centrales del día. La clave es tener suerte y dar con un día radiante, como el que tuvimos cuando tomé las fotos que muestro a continución, nada que ver con el ambiente lluvioso con el que vamos a despedir el año.

El entorno de Pineda de la Sierra es un buen ejemplo de lugar para salir a pasear un rato, pues ofrece rutas de todo tipo, desde las más fáciles aptas para toda la familia como supone recorrer alguno de los tramos de la Vía Verde, hasta las de la ascensión al "picacho" que se ve al fondo para los más valientes

Una de las típicas tenadas serranas que podemos encontrarnos por estos entornos ganaderos

El río Arlanzón en la antesala de su entrada al embalse que lleva su nombre, el primero de los 2 pantanos serranos

Diversos tramos de la Vía Verde de la Demanda comprendidos entre Pineda de la Sierra y el embalse del arlanzón, con el típico bosque de rebollar que podemos encontarnos durante buena parte del recorrido

Vertiente oeste del San Millán, que con sus 2131 m.s.n.m  es el techo de la provincia de Burgos

El aumento térmico que se produce durante las horas centrales del día origina el deshielo de las nieves caídas que en forma de agua se filtra y desliza por entre las rocas, y que al entrar en contacto con las bajas temperaturas nocturnas dan origen a espectaculares y caprichosas formaciones de hielo, auténticas esculturas naturales dignas de ser admiradas

La luna siempre fascina, más aún cuando presenta ese aspecto de enormidad, una ilusión óptica por la que nuestro satélite parece más grande de lo habitual cuando le observamos junto al horizonte

Y de momento esto es todo, con esta secuencia de imágenes doy por cerrado el ciclo anual de entradas, ya que todo lo que escriba a partir de ahora quedará enmarcado en un año diferente, algo que no deja de ser intrascendente en el reino natural, pues en realidad esto del cambio de año es algo nuestro que nada incide en el resto de especies, ya que sus ciclos los señala la madre naturaleza, esa misma en la que estamos tan empeñados en maltratar y adulterar. Así pues, dado que esto es un blog que trata sobre aves, son ellas las que deben marcar los tiempos, y de momento ellas nos dicen que este cambio de año solo es un punto y seguido en su periplo invernal.